Graviola (Guanábana)

La graviola o guanábana es un árbol de la familia Annonáceas que tiene más de 100 especies. Es de la misma familia de la chirimoya.

La graviola se llama Annona Muricata y la chirimoya Annona Cherimola. Ambas con propiedades antioxidantes y anti cancerígenas. La chirimoya proviene del norte del Perú, habiéndose encontrado testimonios en cerámicos de la cultura pre incaica Mochica.

Realmente tanto la chirimoya como la guanábana tienen a muchos frutos dentro de un solo receptáculo o envoltura. Dentro se encuentran cada pequeño fruto con su semilla y sin separación con los frutos vecinos, que conjuntamente tienen una cáscara común. La chirimoya es más dulce y la guanábana o graviola es ligeramente ácida lo que la hace especial para los climas tropicales ya que refresca.

La fruta guanábana es más grande que la chirimoya, hasta 6 veces su tamaño y se viene difundiendo hace varios años de sus maravillosas cualidades antioxidantes y anti cancerígenas, principalmente de la graviola. A la guanábana también se le conoce como chirimoya brasilera.

Diversos estudios en EEUU y Japón dan cuenta de sus propiedades y beneficios en contra del cáncer de pulmón, páncreas y próstata. Esto se fundamenta en el contenido de acetogeninas en las hojas del árbol.

Al compararse con la adriamicina utilizada en las quimioterapias, se demostró que las hojas de la graviola utilizadas en infusión contienen hasta 10,000 veces más potencia.

La adriamicina es un tipo de antibiótico antitumoral que actúa sobre el ADN de las células, dañando tanto al ADN como al cáncer. Suele ser efectivo en diversos tipos de cáncer, pero sus efectos colaterales son negativos.

En cambio las acetogeninas no han mostrado efectos colaterales dañinos hasta el momento.

Investigaciones de la graviola y el cáncer

De la misma manera la anonicina de la graviola también contribuye a los efectos anticancerígenos. Estos estudios se han efectuado en animales o in vitro. En humanos existen estudios aislados por diversas universidades y centros de investigación, así como los diversos testimonios a nivel mundial desde hace una década aproximadamente.

En 1976 se descubrieron las cualidades anti cancerígenas por el Ph.D., Dr. Jerry Mc Laughlin de la Purdue University, en dónde es profesor emérito de farmacognosia. Desde allí se difundió la noticia al mundo.

El problema de la difusión correcta es que no se puede patentar una planta y por lo tanto los laboratorios no tendrían mucho interés en demostrar su efectividad. De allí que los estudios y muestreos se hacen con los compuestos descubiertos.

En todo caso, como preventivo, se puede tomar por temporadas la infusión de las hojas de guanábana. Si ya se tiene el problema cancerígeno se puede tomar conjuntamente con otros productos informados en este blog, como son el bicarbonato de sodio, ganoderma lucidum, té blanco y otras maravillas.

En los casos de Parkinson, se debe tomar con precaución, ya que algunos estudios han demostrado que podría incrementar los síntomas en algunos tipos de esta enfermedad, no en todos.

Es una planta muy fácil de cultivar en los jardines y da de la misma semilla de la fruta que se come. La mejor manera es utilizar abonos orgánicos para que se desarrolle mucho mejor.

Para cosecharla, se debe sacar el fruto verde y dejar que madure fuera de la planta. Toda la fruta tiene propiedades medicinales. Se usa igualmente la semilla para los parásitos intestinales.

Su consumo habitual combate la depresión y los problemas del sistema nervioso. De la misma manera es anti diarreico, antirreumático, anti alérgico. Regula la presión arterial alta.

Consigue las hojas del árbol o brotes tiernos del fruto y hazlos en infusión. Puedes triturarlas previamente para aprovecharlos mejor. Igualmente existen en el mercado cápsulas de extracto de graviola que puedes consumir.